Pandemia e patriarcado: escuta sobre as experiências de mulheres rurais em uma cidade no sul de Minas Gerais

Abstract

La pandemia de COVID-19, provocada por el virus SARS-CoV-2, ha golpeado de manera inestimable a la humanidad, sin embargo, no se puede decir que haya golpeado a todos de la misma manera. Los grupos más vulnerables experimentaron mayores impactos ante esta fatal realidad. Como es el caso de las mujeres, especialmente las rurales, que por vivir en una sociedad marcada por la opresión y explotación patriarcal, enfrentan varios desafíos en días comunes; como en el ámbito de la división sexual del trabajo, la explotación que se vive por la imposición del trabajo reproductivo a las mujeres, así como diversas desigualdades marcadas por la superposición entre sexo, raza y clase. Con la pandemia, esta realidad puede haber empeorado. Por lo tanto, esta investigación tiene como objetivo capturar los significados atribuidos a las experiencias vividas por un grupo de mujeres rurales del sur de Minas Gerais, durante el primer año de la pandemia, 2020, que impuso la necesidad de aislamiento social, considerando la estructura patriarcal de sad anclada en la división sexual del trabajo. Se trata de una investigación cualitativa, que utilizó entrevistas abiertas, con un sesgo metodológico fenomenológico. En esta investigación, se “revelan” resultados a partir de experiencias que apuntan a sentimientos de miedo e inseguridades derivados de la pandemia, así como preocupaciones e incertidumbres, como el riesgo de contaminación. Además de la sobrecarga emocional vivida con el distanciamiento del contacto físico por el aislamiento social, y el miedo a la enfermedad y la muerte. Otros temas destacados se refieren a la sobrecarga de trabajo realizado por las mujeres, la soledad y la falta de atención hacia ellas, lo que contribuyó al surgimiento de psicopatologías. Las experiencias descritas por las mujeres muestran cómo se atribuyen roles sociales específicos exclusivamente a las mujeres, como el cuidado de los hijos, las actividades domésticas, entre otros, dejando en evidencia las relaciones de opresión, explotación y dominación vividas. Con los dichos de las entrevistadas, fue posible comprender que el trabajo de reproducir la vida es realizado por las mujeres, siendo desvalorizado e ignorado, entendido como una obligación hecha “por amor”, generando peso, cansancio y sobrecarga.